viernes, 11 de marzo de 2011

5 días

Quiero respirar su aire una vez más, solo un respiro antes de su partida.
Él cogió suavemente mi mentón con las dos manos, mi mirada chocó con la suya inevitablemente, mis ojos se cubrieron de un aspecto cristalino brillante, ese cristal se agrietó por la emoción y una lágrima se deslizo por mi mejilla hasta llegar a mis labios, él me rodeo con sus brazos, se acercó poco a poco para finalmente esta vez chocarse con mis labios, se desató una dulce locura por 2 minutos para después las agujas del reloj dictar su sentencia y alejarle de mi de nuevo, es la hora de abrazarle y esperar 5 días teniendo de compañía su recuerdo, su amor metido hasta los huesos, sus caricias sumergidas en mi piel pidiendo ser pronto salidas a superficie, su aroma impregnada en mi ropa y él portando de maleta tan solo mi corazón. 
Nunca se me dieron bien las despedidas, aunque sean por unos días con un "hasta luego" o un "hasta pronto". Es superior a mi ese instante en el que le veo alejarse de mi y yo me quedo mirándole desde el portal hasta que mi vista no alcanza a verle más, hasta que el rugido del coche poco a poco se esfuma y no alcanzo a oírlo. Pero en ese instante que pasa y él se va mi reloj vuelve a ponerse en marcha de nuevo, mis manecillas piden a gritos que los 5 días pasen rápido para después como cada viernes volver a pararse el tiempo entre nosotros.